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Normalmente asociamos los prebióticos y los probióticos con los medicamentos, ¿no es así? Pero, ¿pueden estas sustancias también usarse en cosméticos? Resulta que sí, y los beneficios que aportan es significativo. ¿Cómo funcionan esos productos y cómo usarlos? Continúa leyendo mi entrada para encontrar la respuesta.

¿Para quién son los prebióticos y los probióticos?

Los cosméticos que contienen prebióticos y probióticos generalmente se recomiendan para personas con piel sensible, irritada y dañada. Su misión es reconstruir la flora microbiológica de la piel y contrarrestar la multiplicación de microbios dañinos. ¿Cuál es el papel que juegan estos organismos microscópicos en nuestro organismo?

La microflora residente en humanos (por ejemplo, saprobiontes, dermatofitos) es excepcionalmente importante para nuestra piel. Protegen nuestro cuerpo de los gérmenes que pueden conducir al desarrollo de enfermedades graves. A cambio de la protección, reciben alimentos en forma de grasa, sudor y células muertas de la epidermis. En nuestra piel también habita la microflora transitoria; incluye organismos cuya vida útil es muy corta (algunas horas, días, semanas). Pueden causar enfermedades solo cuando la composición de la microflora residente cambia como consecuencia de una atención inadecuada o la influencia del entorno externo.

La composición y cantidad de microflora depende de muchos factores. Podemos incluir: raza, sexo, edad, estado de salud, nivel de hormonas, medicación, dieta, la ropa que vestimos, condiciones de vida, higiene, inmunidad y muchos, muchos más. Además, el pH bajo de la piel desempeña un papel muy importante, lo que favorece el mantenimiento de la microflora residente en un nivel adecuado.

¿Qué daña la flora microbiológica de la piel?

En primer lugar, la higiene excesiva o incorrecta. Después de lavarte el cuerpo, la cantidad de microorganismos saludables se reduce. Afortunadamente, les toma poco tiempo restaurar su cantidad anterior. Sin embargo, el baño frecuente y el uso de detergentes fuertes causan daños a la flora a largo plazo. Nocivo es también la desinfección de la piel cuando mueren ambos, el microorganismo bueno y el malo. Por lo tanto, deberías abstenerte de usar jabones alcalinos, conservantes, ácidos cosméticos y médicos, así como desodorantes. Tampoco deberías exagerar tomando el sol, enfriar rápidamente el organismo ni ingerir antibióticos con frecuencia.

Prebióticos y probióticos en cosméticos

Los cosméticos con probióticos se recomiendan para personas con dermatitis atópica (EA), psoriasis, acné y problemas en las partes íntimas. Además, son útiles para luchar contra las reacciones alérgicas, después de terminar el tratamiento con antibióticos y después de los procedimientos invasivos de la medicina estética. Su misión es proteger de los agentes patógenos, reforzar la inmunidad de la piel, apoyar la regeneración y aliviar las irritaciones.

Los prebióticos en los cosméticos estimulan el crecimiento de los microorganismos. Están presentes en las plantas y se pueden obtener a partir de proteínas, grasas y oligosacáridos o polisacáridos. Se recomiendan para cuidar la piel sensible de niños y adultos. Los prebióticos también están presentes en los cosméticos anticaspa, los protectores solares, los productos para el cuidado de la piel y los desodorantes. Contrarrestan el desarrollo del acné y las infecciones en las partes íntimas.