¡Hola, chicas!

Me imagino que tu primer pensamiento con respecto a esta publicación es “Lo siento, pero nadie tiene que decirme cómo se supone que debo usar una mousse o un spray capilar”. No necesitas este tipo de negatividad en tu vida, ¿verdad? 😉

Sin embargo, déjame decirte algo.

La idea de esta entrada vino del hecho de que recientemente he visto a muchas personas usando peinados realmente raros, lo que en mi opinión es el resultado no muy hábil del uso de cosméticos para peinado. No sé cuál es la razón detrás de esta “tendencia”… tal vez la falta de tiempo por las mañanas, la prisa, o demasiada confianza en un cosmético en particular. De todos modos, estoy aquí para ayudarte y rescatar tu cabello. Permite que te muestre una guía donde analizo los métodos con los que los productos capilares NO DEBERÍAN aplicarse.

1. MOUSSE: un cosmético genial. Doma, arregla y disciplina el cabello sin apelmazarlo. Lo que es interesante es que las mousses decentes tienen características para el cuidado del cabello y pueden nutrirlo. Sin embargo, las mousses deben aplicarse con habilidad, y la mejor manera de hacerlo es mediante la distribución del producto mediante un peine de dientes dispuestos ampliamente. De lo contrario, el pelo podría amontonarse, volverse rígido y como una red, pareciéndose remotamente a algo que se suponía que era un peinado.

2. SPRAY DE CABELLO: el mejor traidor del peinado que puede acabar en su caída. Este efecto involuntario se obtiene rociando demasiado producto o aplicando un spray capilar manteniendo la botella demasiado cerca del pelo y la cabeza. El resultado: pelo rígido que no tiene nada en común con el cabello natural y atractivo.

3. CHAMPÚ EN SECO – ¡Evita echar demasiado! Estas manchas de talco son visibles en el momento en que se aplica (especialmente) al cabello oscuro y, desafortunadamente, no le da encanto al peinado. El cabello se queda con manchas grises que nos hacen parecer fatigadas y abrumadas. Agita la botella con un champú en seco y rocíala manteniéndola a una distancia entre el bote y la cabeza. Luego, masajea bien el producto y péinate el pelo como de costumbre. Recuerda eliminar el exceso de talco, por ejemplo, frotando una toalla seca contra el cabello cuando se vea la mancha.

El último consejo para ti. Recuerda que cada cosmético simplemente causará más mal que bien si se usa en abundancia.